viernes, 21 de diciembre de 2012

Es mucho más que un te quiero.

¿Qué te quiero? No, no solo es eso, es mucho más, creo que esa palabra no se acerca ni lo más mínimo a lo que siento por ti, a todas las sensaciones que pasan por mi cuerpo cada vez que te veo, ni a todas las sonrisas que te dedico al día, ni a todo lo que estaría dispuesta a dejar por ti, ni tampoco al papel que ocupas en mi vida, ni mucho menos al tiempo que me gustaría estar a tu lado.Parece increíble lo mucho que te puede llegar a importar alguien ¿No es así? Como te comes la cabeza, te rayas, te deprimes, te haces mil preguntas y todas sin respuesta, porque ciertamente, nadie las puede responder. Y no poder quitártelo de la cabeza, es insoportable pero a la vez fascinante. Querer estar con esa persona en cada cosa que haces y pensar “Ojalá estuviera ahora aquí, conmigo”, querer a alguien. Tener miedo. Y por mucho que intenten entender lo importante que es para ti esa persona, no lo entenderán, jamás lo harán como tú lo haces. Porque, siempre habrá alguien que aunque no quieras,siempre será tu debilidad, que si te sonríe tú sonreirás, que si te habla, tú contestaras, y si te necesita, tú seguirás estando ahí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario